El pasado domingo 23 de febrero se cumplió un año del derrumbe de un edificio en el barrio LU4 de Comodoro Rivadavia. El hecho, que ocurrió a principios de 2024, provocó la evacuación de 17 personas que vivían en el lugar y la clausura del mismo.
En este marco, Liliana Orozco, una de las vecinas afectadas, habló con ADNSUR y contó la dura situación que siguen viviendo 365 días después del hecho, al revelar que todavía no pudieron volver a sus casas y continúan esperando las respuestas de las autoridades.
“Cuando sucedió el siniestro, quienes evacuaron a los vecinos y a mí fueron Defensa Civil, los bomberos en compañía también de la policía de la provincia”, comenzó explicando. En tanto, recordó que fueron las autoridades del municipio quienes clausuraron el edificio; por ende, nosotros no pudimos ingresar nunca más a nuestros departamentos.”
Además, reveló que desde el primer momento, solicitaron un informe interdisciplinario que determine el estado del edificio y las acciones necesarias para habilitarlo nuevamente. Sin embargo, aún no obtienen respuesta.
Según Orozco, el informe solicitado requiere la toma de muestras del concreto y la compactación del lugar, con el fin de determinar el grado de deterioro de la estructura, comparándola “con las muestras históricas de lo que se presentó por allá hace 40 años en el momento que se inicia la obra”. Esta tarea, según asegura Liliana, debería realizarse con profesionales especializados. A pesar de que se autorizaron fondos para ello en julio del año pasado, el informe sigue sin elaborarse. De esta manera, reconoció que pasaron, las semanas y los meses hasta cumplirse un año.
En tanto, contó la situación que atraviesan los vecinos que tuvieron que dejar su casa y todos sus objetos en el lugar, donde “hoy es un nido de ratas y de palomas que están usufructuando lo poco que queda de nuestro sacrificio.”
“Más allá de lo que los maleantes o los dueños de lo ajeno han intentado hacer, los dos departamentos de la parte inferior han sido violentados vez tras vez; incluso, uno de ellos fue violentado el domingo anterior”, agregó.
“Muchas familias estamos viviendo en casa de familiares o alquilando. En mi caso, vivo alquilando, pero hay muchos vecinos jubilados, con ingresos bajos, que no pueden cubrir el alquiler y las necesidades básicas”, señaló Liliana con preocupación.
En tanto, aseguró que a situación es especialmente difícil para aquellos vecinos de más edad. “La mayoría supera los 70 años, y muchos no pueden moverse con facilidad. Algunos, como Bautista de 78 años, ”el socio número uno, que es quien cuida y vigila el edificio todos los días. Él está viviendo de prestado”.
“Ellos quieren volver a su hogar, no solo por lo económico, sino por lo emocional. Trabajaron toda una vida para tener esa casa y hoy están en la calle”, añadió.
Por último, la vecina de LU4 remarcó que se enfrentan a la negativa de los abogados de tomar el caso. “Se supone que si el municipio clausura, el municipio te hace la entrega de un informe escrito de lo que tú tienes que hacer para habilitarlo nuevamente. Si eso no está, como que es lógico, es lo que nos dicen los abogados, no deberíamos intervenir”, concluyó.