No fue una simple entrada. Fue un robo planificado, veloz y brutal. El 15 de marzo de 2024, un hombre armado entró a cara descubierta —aunque con casco de moto— a la sucursal de Crédito Argentino, ubicada en Miguel Muñoz 165, pleno centro de Cipolletti, y escapó con cerca de un millón de pesos. Durante más de un año, su desfile fue un misterio. Hasta hoy.
Gracias a una investigación conjunta entre las policías de Río Negro y Neuquén, finalmente fue detenido el autor del asalto. La captura ocurrió en el barrio 7 de Mayo, en Neuquén capital, un asentamiento ubicado sobre la meseta neuquina, al lado de la toma “Casimiro Gómez”, donde el delincuente vivía con su pareja.
En aquel robo, el asaltante ingresó al local simulando ser un cliente, y una vez adentro, sacó un arma de fuego, amenazó a la empleada y se llevó la recaudación del día. Luego, huyó en moto. Las cámaras de seguridad ayudaron a seguir su fuga hasta el barrio Sapere, también en la capital neuquina, pero el rastro se perdió: el ladrón ya había abandonado el lugar.
Durante meses no hubo novedades, hasta que un cruce de datos y el aporte de fuentes confidenciales permitió identificarlo con precisión. A partir de allí, fue solo cuestión de tiempo.
Este jueves por la mañana, efectivos de la Policía neuquina —acompañados por el Cuerpo de Investigación Judicial de Cipolletti— dieron con el sospechoso y lo detuvieron sin resistencia. El hombre quedó a disposición de la Justicia y será trasladado a Cipolletti, donde se enfrentará a cargos por robo a mano armada.
