Una compra inocente se transformó en una pesadilla aterradora para una mujer de Salta, quien denunció que un muñeco del popular personaje infantil Topo Gigio, adquirido en una feria solidaria, desató una serie de fenómenos paranormales y tragedias en su hogar, poniendo en riesgo la vida de su bebé y sembrando el terror en su familia.
EL ORIGEN DEL HORROR: LA FERIA SOLIDARIA
Todo comenzó en la Feria de la Solidaridad, en la zona sur de Salta capital, donde la mujer, madre de cuatro hijos, decidió comprar un muñeco del Topo Gigio para decorar la habitación de los niños. Lo que parecía un hallazgo inofensivo pronto se convirtió en el epicentro de sucesos inexplicables y terroríficos.
Desde la primera noche tras llevar el muñeco a casa, la familia empezó a experimentar fenómenos extraños. La madre relató que el muñeco aparecía en lugares diferentes a donde lo dejaba, como sentado en la cabecera de la cama del bebé, sin que ella lo moviera. Además, comenzaron a escucharse ruidos extraños, susurros, risas sin origen y observar sombras y figuras inhumanas que paralizaban a la familia, especialmente a la hija mayor.
El ambiente se volvió opresivo con un olor fétido y una humedad inexplicable dentro de la vivienda. La situación se agravó con la muerte del perro familiar, que apareció con marcas profundas en el cuello, y la desaparición de la gata sin dejar rastro.
La madre empezó a sufrir pesadillas diabólicas en las que el muñeco del Topo Gigio se transformaba en una criatura con garras y ojos rojos, acercándose amenazante al bebé. Estas pesadillas la despertaban empapada en sudor y con el corazón acelerado, incrementando su angustia y miedo.
Desesperada, la mujer recurrió a una vecina que la puso en contacto con un sacerdote para que bendijera la casa, intentando así expulsar la supuesta presencia maligna. Aunque el muñeco fue retirado de la casa, al día siguiente apareció de nuevo, esta vez en la mesa de la cocina, como si nunca se hubiese ido.
EL BEBÉ, LA VÍCTIMA FATAL
El punto más crítico llegó cuando el bebé comenzó a llorar desconsoladamente cada madrugada. La madre descubrió marcas rojas y profundas en el cuello y brazos del niño. A pesar de llevarlo al hospital, donde los médicos no encontraron causa física alguna para las lesiones, las marcas persistían y el llanto no cesaba, lo que profundizó el clima de terror y desesperación en la familia.
El relato, difundido por el usuario Maxi Zelaya en Facebook, se viralizó rápidamente, estremeciendo a miles de personas y generando un intenso debate en redes sociales sobre la posibilidad de que un objeto pueda estar maldito o poseído por un espíritu maligno. La historia despertó tanto escepticismo como temor, y puso en evidencia la influencia de creencias populares y fenómenos paranormales en la vida cotidiana.
QUIÉN ES EL TOPO GIGIO
Topo Gigio es un personaje infantil icónico que nació en Italia en 1958, creado por la artista de animación María Perego junto a su esposo Federico Caldura. Este pequeño ratón de gomaespuma, vestido con ropajes humanos, debutó en la televisión italiana en 1959 en el programa Canzonissima. Su nombre proviene del italiano: “topo” significa ratón y “Gigio” es un diminutivo cariñoso de Luigi, equivalente a Luis en español.
La marioneta se destacó por su animación innovadora, donde los manipuladores, vestidos de negro, ocultos tras un fondo oscuro, le daban vida con movimientos expresivos como la caída de ojos o las orejas caídas para mostrar vergüenza o timidez. Su voz original en italiano fue interpretada por Peppino Mazzullo, y el personaje rápidamente conquistó no solo a niños sino también a adultos por su ternura y carisma. Topo Gigio llegó a protagonizar programas, películas y discos, convirtiéndose en un fenómeno mundial.
Aunque originario de Italia, Topo Gigio alcanzó gran popularidad en América Latina, especialmente en Argentina durante los años 60 y 80, donde fue parte de programas televisivos y se ganó el cariño de varias generaciones. Su sencillez y simpatía, junto con frases memorables y su característico gesto de bajar la mirada cuando sentía vergüenza, lo convirtieron en un personaje entrañable que aún hoy despierta nostalgia y afecto en el público.