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Militantes kirchneristas destrozaron el ingreso a un canal de televisión, rompieron autos y lanzaron escombros

 Un grupo de manifestantes vinculados con el kirchnerismo irrumpió por la fuerza en el edificio de la empresa ARTEAR, donde funcionan las señales TN y Canal 13, luego de que la Corte Suprema dejara firme la condena a Cristina Fernández de Kirchner por corrupción en la causa Vialidad.

El ataque ocurrió en la tarde del martes en la sede ubicada sobre la calle Lima al 1200, a pocas cuadras del domicilio porteño de la ex presidenta en Constitución.

Los manifestantes, que portaban banderas y entonaban cánticos a favor de la ex mandataria, ingresaron violentamente tras forzar uno de los ingresos laterales del edificio. Superaron al personal de seguridad privada y se dirigieron a los accesos principales del canal, donde causaron destrozos en vehículos, ventanales, equipos técnicos y vitrinas. Testigos relataron escenas de pánico entre trabajadores del medio, mientras otros debieron resguardarse dentro de las oficinas.

El episodio fue rápidamente repudiado por la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), que emitió un comunicado en el que condenó “enérgicamente este grave ataque contra la libertad de prensa” y exigió al Gobierno y a las autoridades judiciales “una investigación urgente, la identificación de los responsables y su sanción conforme a derecho”. Además, solicitó el refuerzo de las medidas de seguridad para medios de comunicación y periodistas, ante un contexto creciente de tensión política.

La Policía de la Ciudad desplegó un operativo en la zona apenas se reportó el incidente. Agentes de la Comisaría Vecinal 1B se presentaron en el lugar y comenzaron a relevar imágenes de cámaras de seguridad tanto del canal como de los alrededores. Algunas grabaciones internas habrían captado con claridad los rostros de varios atacantes. Fuentes del Ministerio de Seguridad porteño confirmaron que se abrirá una causa judicial por daño agravado, violación de propiedad privada e intimidación pública.

El violento episodio se registró horas después de que la Corte Suprema de Justicia ratificara la condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos contra Cristina Fernández de Kirchner. La sentencia, que ya no admite apelación, derivó en un nuevo clima de tensión política. Desde entonces, militantes comenzaron a congregarse en inmediaciones de su casa y en la sede del PJ nacional. Algunos grupos reducidos, según testigos, se dirigieron posteriormente hacia el edificio de ARTEAR.

Voceros del canal informaron que se presentarán como querellantes en la causa judicial que se abrirá en las próximas horas. Mientras tanto, tanto el Gobierno de la Ciudad como la Fiscalía de Flagrancia ya iniciaron actuaciones de oficio.

En el entorno del kirchnerismo, en tanto, aún no hubo declaraciones oficiales sobre el incidente. Algunos dirigentes señalaron que se trató de una reacción “espontánea” de la militancia ante lo que consideran una “persecución judicial” contra Cristina Kirchner. Sin embargo, desde el resto del arco político, incluso sectores del peronismo más moderado, surgieron críticas al accionar violento y llamados a mantener la paz social.