Este lunes 21 de julio César Zapata, delegado del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) en Puerto Madryn, confirmó a la prensa, que fueron convocados a una reunión de urgencia en el Ministerio de Capital Humano de la Nación, prevista para este martes 22 de julio.
Cabe recordar que la convocatoria busca abordar el grave conflicto laboral que atraviesa la industria pesquera, originado por la intención de algunas empresas de imponer una reducción salarial del 30% a los marineros.
En tanto, el hombre advirtió sobre maniobras ilegales de empresarios para imponer contratos con rebajas salariales de hasta un 30%. El conflicto paraliza puertos clave del país y amenaza la economía regional.
“El reclamo es para que las empresas respeten nuestro convenio colectivo de trabajo y no induzcan a firmar algo que no estaba avalado ni por el Ministerio de Trabajo ni por el gremio”, aseguró Zapata.
Según explicó, el conflicto comenzó tras una reunión entre empresarios pesqueros realizada en Barcelona, donde se habría acordado avanzar con el ajuste salarial. “No se le había tomado tanta importancia y al final terminó siendo un problema para todos, pero esto lo hablaron en Barcelona”, resaltó.
LA TENSIÓN EN PUERTO MADRYN
El punto más tenso del conflicto se vivió cuando tres embarcaciones llegaron a la ciudad de Madryn. De esta manera, una vez a bordo, los marineros fueron presionados a firmar un contrato con la baja del 30% salarial, en presencia de un escribano. Los 90 tripulantes se negaron a firmar y fueron desembarcados.
“Nosotros hace dos semanas habíamos firmado un acta de acuerdo de una suba salarial y ellos mismos se comprometían a no tocar el convenio colectivo de trabajo y, de un día para el otro, vienen con un contrato de ajuste a la baja del 30%”, denunció Zapata. “Eso es una extorsión”.
El sindicato presentó denuncias formales ante el Ministerio de Trabajo de Chubut y la Prefectura Naval para resguardar los derechos laborales de los trabajadores.
A pesar de las gestiones para intentar destrabar el conflicto en Buenos Aires, las soluciones no prosperaron. “Le están haciendo mal a la ciudad. Dos o tres empresarios manejan el recurso de todos los argentinos”, denunció Zapata. Y concluyó: “No les importa ni el alivio fiscal, ni el convenio. Solo quieren bajar el sueldo”.
ESCALADA DEL CONFLICTO: AMENAZAS, BARCOS PARADOS Y TEMOR POR LA VIOLENCIA
El conflicto que mantiene paralizada la pesca de langostino en aguas nacionales sumó un nuevo capítulo de tensión. Tras las amenazas recibidas por marineros dispuestos a firmar acuerdos individuales, las cámaras empresariales decidieron suspender por tiempo indeterminado la bajada de barcos prevista para el 23 de julio.
“La familia siempre está primero. Cuando se la amenaza, se toca la fibra más íntima de cada persona”, expresaron las empresas en un comunicado. “Nos toca decir basta”, agregaron, aludiendo a intimidaciones que habrían sufrido algunos trabajadores.
Desde el sector pesquero aseguran que el gremio no acepta modificar el Convenio Colectivo de Trabajo para ajustar ítems vinculados a la producción, en un contexto que describen como “deficitario” por los costos internos y los precios internacionales. En tanto, el SOMU denunció extorsión por parte de las empresas al convocar marineros bajo la amenaza de sanciones laborales.
Con información de La Opinión Austral, redactada y editada por un periodista de ADNSUR