La vida de Joaquín Arbe, el fondista olímpico nacido en Esquel, se mueve entre la alta competencia y los desafíos cotidianos de cualquier argentino. Viene de ganar con autoridad los 30K de ruta en Buenos Aires, prueba en la que buscaba mejorar su propio récord argentino. Sin embargo, a poco de cruzar la meta, la realidad volvió a golpear fuerte: una factura de luz que supera el medio millón de pesos.
“Me bajoneó un poco. Hoy me dijo mi novia que llegó una boleta de 540 mil pesos… Por suerte lo que gané el domingo alcanza para pagarla, pero es una locura”, relató en diálogo con Tiempo Deportivo, por Jornada Radio. Arbe vive en una zona sin gas natural, lo que lo obliga a calefaccionarse con leña y caloventores, disparando el consumo eléctrico.
ENTRE RÉCORDS Y FACTURAS IMPAGABLES
Arbe ganó el domingo pasado los 30K en CABA, acompañado por liebres hasta el kilómetro 19. Iba en ritmo de récord (3:02 por kilómetro), pero el viento cruzado y de frente lo frenó en los últimos tramos. “Terminé a más de 30 segundos arriba del récord, pero fue un buen apronte para lo que viene”, valoró. Su gran objetivo: el Maratón de Buenos Aires en septiembre, donde buscará mejorar su marca nacional.
El esquelense tiene 48 títulos argentinos en todas las categorías y este sábado irá por el campeonato número 49 en el Nacional de Cross, donde es el vigente campeón. “Trato de no pensar si estoy bien o mal físicamente. He corrido con pubalgia, doble hernia inguinal o desgarros. Cuando largo, voy hasta el final”, sostuvo.
LA LUCHA DE SIEMPRE
A pesar de sus logros, el apoyo estatal sigue siendo limitado. “Me reuní con la nueva gestión de Deportes y pedí ayuda para la escuelita barrial y también una asistencia personal, porque vivir sin gas es muy costoso. Ya venía pagando 250 o 260 mil por mes, pero lo de ahora es una locura”.
El atleta también contó que espera recuperar la cobertura de obra social para poder hacerse estudios. Mientras tanto, se apoya en sponsors privados y en su propia constancia: “Arranqué el año corriendo mucho porque en enero y febrero los contratos se demoran. Ahora estoy más aliviado, gané buenas premiaciones y eso ayuda”.
Luego del Cross Nacional, Arbe ya tiene en la mira los 15K de New Balance, el Campeonato Argentino de Medio Maratón y, finalmente, los 42K porteños de septiembre. “La gente sigue apoyando este desafío de correr todos los meses. De algún lado siempre sale una mano. Y mientras me den las piernas, voy a seguir”, cerró.