La creciente inseguridad en zonas cercanas a locales nocturnos genera preocupación entre vecinos y autoridades. En muchas ciudades del país, los enfrentamientos, agresiones y hechos de violencia que se registran durante la madrugada, cuando los boliches y bares cierran sus puertas, vienen dejando un saldo de heridos y situaciones de riesgo que exponen a quienes salen a divertirse.
El descontrol, el consumo excesivo de alcohol y, en algunos casos, la portación de armas agravan el escenario. En este contexto, las fuerzas de seguridad buscan reforzar los patrullajes nocturnos, pero aún así no siempre logran anticiparse a situaciones violentas que se desarrollan de manera rápida y sorpresiva.
En este marco, la ciudad santacruceña de Caleta Olivia fue escenario de un grave episodio en la madrugada del sábado 13 de julio, cuando un joven fue baleado cerca de un boliche ubicado sobre la Avenida Independencia. El hecho se produjo alrededor de las 4:15 de la madrugada y encendió nuevamente las alarmas sobre la necesidad de reforzar la prevención en zonas donde se concentran jóvenes durante la noche.
De acuerdo a fuentes policiales, una persona llamó al 911 para alertar sobre una situación crítica. Un joven herido por un arma de fuego y agresores que se habrían dado a la fuga. Inmediatamente, efectivos de la Policía de Santa Cruz se hicieron presentes en el lugar y constataron que había un joven tendido en el suelo con una herida de bala en una de sus extremidades, aunque no se precisó si fue en la pierna o el brazo.
El herido fue atendido rápidamente por personal médico y trasladado al hospital local, donde permanece internado en observación. Hasta el momento, su estado de salud es reservado, aunque se informó que está fuera de peligro.
Paralelamente, los agentes desplegaron un operativo de búsqueda en las inmediaciones, y lograron detener a uno de los sospechosos que, según testigos, estaba intentando alejarse del lugar caminando de forma rápida. El detenido fue trasladado a la comisaría y quedó a disposición de la Justicia, mientras continúan las investigaciones para esclarecer los motivos del ataque y determinar si hubo más personas involucradas.
El hecho reaviva el debate sobre los niveles de violencia en horarios nocturnos, el uso de armas de fuego en la vía pública y la necesidad de medidas más firmes para evitar que la diversión se convierta en tragedia.
Con información de El Diario Nuevo Día, redactada y editada por un periodista de ADNSUR
