El caso que conmociona a la ciudad de San Javier, en la provincia de Misiones, tiene como protagonista a una mujer empleada doméstica que fue denunciada y detenida luego de presuntamente haber robado la identidad de su empleadora para gestionar préstamos fraudulentos en el Banco Nación.
La trama de esta estafa financiera se descubrió a partir de irregularidades detectadas por la propia víctima en su cuenta bancaria y la investigación posterior que llevó a la intervención judicial.
LA ECHARON DEL TRABAJO Y SE VENGÓ ROBANDO LA IDENTIDAD DE SU EX JEFA
El episodio comenzó a fines del mes de agosto de 2025, cuando María, una mujer de 74 años, notó movimientos bancarios sospechosos en su cuenta personal. Alarmada por estas operaciones extrañas, inició una revisión detallada y descubrió que se habían solicitado créditos mediante su cuenta por una suma que superaba el millón de pesos argentinos.
La cifra exacta ascendía a $1.168.200, créditos que, según pudo establecer, no correspondían a su autorización ni conocimiento.
Tras analizar la situación y considerando que su relación laboral con su empleada doméstica había terminado semanas antes, orientó sus sospechas hacia esta persona. Examinando las circunstancias y la cercanía previa, María decidió acudir a la Policía de Misiones para presentar formalmente la denuncia, poniendo en marcha la pesquisa judicial que desentrañaría la mecánica del fraude.
La denuncia activó una investigación que estuvo bajo la supervisión del Juzgado de Instrucción Número Cinco de la localidad de Alem, en Misiones. A partir de un trabajo policial minucioso, los investigadores concluyeron que la acusada, identificada con las iniciales D.E., había utilizado indebidamente datos personales y financieros de la víctima para solicitar y gestionar créditos en el Banco Nación sin ninguna autorización.
Para concretar la detención y el secuestro de evidencias, las fuerzas de seguridad realizaron un operativo el jueves 4 de septiembre alrededor de las 19:30 horas, en un domicilio ligado a D.E., ubicado en el barrio Santa Rita, uno de los sectores residenciales de San Javier.
Durante el procedimiento, los efectivos policiales incautaron varios elementos de importancia para la causa, entre ellos dos teléfonos celulares, uno de la marca Itel y otro Samsung, además del Documento Nacional de Identidad original de la denunciante.
Estos dispositivos serán sometidos a peritajes técnicos que podrían aportar pruebas cruciales sobre el uso indebido y el manejo de la documentación y fondos en cuestión. Otros objetos también fueron retenidos para esclarecer la mecánica que permitió consumar este delito.
A pesar de la gravedad de los hechos y la evidencia reunida, la Justicia decidió que D.E. continúe en libertad, bajo la condición clara de que no puede abandonar la jurisdicción de San Javier y deberá presentarse ante las autoridades cuando sea requerida. Fue legalmente notificada sobre la apertura de la causa en su contra y queda supeditada al avance de la investigación, cuyo objetivo es confirmar su participación en esta maniobra ilícita y establecer si hubo cómplices o complicidades adicionales.