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Mirtha Legrand volvió a las urnas a sus 98 años y emocionó a todos: “Siento una felicidad enorme…”

 Desde bien temprano, la Argentina vive un domingo marcado por las Elecciones Legislativas 2025, y las figuras del espectáculo no quisieron quedarse al margen. Entre flashes, cámaras y aplausos, Mirtha Legrand volvió a convertirse en protagonista al acercarse, puntual y elegante como siempre, a cumplir con su deber cívico.

Pasadas las 13, la diva de los almuerzos llegó a la Escuela Primaria Común N.º 20 Carlos María Biedma, en la calle Güemes 4621, luciendo un impecable conjunto con los colores de la bandera argentina. Apenas bajó de su auto, la esperaban periodistas y curiosos que celebraron su presencia con afecto.

“Sí, contentísima. Además, ayer hice un rating buenísimo”, comentó entre risas, dejando en claro que su entusiasmo por el éxito profesional se mezcla con el compromiso ciudadano.

En diálogo con la prensa, Mirtha expresó su alegría por participar de esta jornada electoral: “Cambió todo y me lo explicaron. Cambió totalmente la manera de votar. Siento una felicidad enorme. Voto con ilusión”, dijo mientras mostraba su look patriótico, una elección que, según contó, quiso hacer “por amor a la patria”.

Con la lucidez y energía que la caracterizan, también recordó sus primeras veces en las urnas: “La primera vez que voté, ¡hace muchísimo!”, bromeó, despertando risas y aplausos entre los presentes que aprovecharon para sacarse selfies con ella.

Ya dentro del establecimiento, la conductora cumplió con su voto y, al salir, volvió a dirigirse a los medios. Con emoción, expresó: “Que siempre haya libertad en la Argentina para votar y que sea un país democrático”. Ante la pregunta sobre si todavía la moviliza el acto de votar, respondió sin dudar: “Siempre”.

A sus años, Mirtha continúa siendo ejemplo de compromiso. Aunque el voto es optativo para las personas mayores de 70, la diva jamás dejó de participar en ninguna elección. Sin importar la edad ni las cámaras, cada vez que el país la convoca, ella llega puntual, DNI en mano y con la emoción intacta.

Un gesto simple, pero poderoso: el de una mujer que, después de décadas frente a las pantallas, sigue eligiendo ser protagonista también en la historia democrática argentina.