Un homicidio ocurrido el pasado viernes 31 de octubre en la intersección de Avenida Muzzio y Estanislao del Campo conmociona a Puerto Madryn. Precisamente, y tras varios días de investigación, las cámaras de seguridad captaron el momento exacto en que Thiago Molina (21) persiguió y atacó a Julián Ariel Navarro (20) con un cuchillo, provocándole una herida mortal en el corazón.
Molina quedó detenido y se le dictó prisión preventiva mientras avanza la investigación judicial. La jueza penal Patricia Reyes, a solicitud de la fiscalía, resolvió imponer seis meses de prisión preventiva a Thiago Molina, acusado de homicidio según el artículo 79 del Código Penal, que contempla penas de 8 a 25 años de prisión.
La decisión se tomó durante una audiencia realizada el fin de semana, en respuesta al pedido del fiscal Juan Pablo Santos, quien destacó los riesgos procesales y la necesidad de asegurar el normal desarrollo del proceso judicial.
UNA CÁMARA CAPTÓ EL MOMENTO DEL VIOLENTO ATAQUE
Según las evidencias recolectadas, la víctima y el agresor mantenían un conflicto previo desde 2023. El día del ataque, Molina habría seguido a Navarro en una motocicleta desde la zona de Avenida 20 de Junio y Gales hasta Avenida Muzzio, donde finalmente lo atacó.
Las cámaras captaron una primera discusión entre ambos, tras la cual Julián Navarro intentó retirarse en su vehículo para poner distancia.
Sin embargo, la persecución continuó y a las pocas cuadras Molina alcanzó nuevamente a Navarro, esta vez dentro de su automóvil, y le propinó una puñalada fatal en el pecho con un cuchillo Tramontina de cocina, del que se secuestró el arma durante los allanamientos relacionados con la causa.
Tras el ataque, la víctima intentó llegar a un hospital, pero se desvaneció luego de pocas cuadras y falleció en el camino.
CÓMO SIGUE LA CAUSA
Tras el incidente, Thiago Molina se presentó acompañado por su defensor Héctor Vargas en la Comisaría Primera y quedó detenido formalmente. En la audiencia, el acusado optó por no declarar.
Personal policial y judicial llevaron a cabo allanamientos en busca de pruebas, asegurando teléfonos celulares y prendas vinculadas al caso. La causa tiene un plazo máximo de seis meses para ser elevada a juicio.
El caso está siendo tratado con máxima rigurosidad por la justicia local, que espera que las pruebas reunidas, entre ellas el material audiovisual de las cámaras de seguridad, aporten claridad y permitan avanzar hacia una condena acorde a la gravedad del crimen.
Gacetilla Prensa Ministerio Público Fiscal, intervenida y editada por un periodista de ADNSUR
