La reciente decisión del gobierno argentino de reducir y eliminar progresivamente los aranceles de importación para productos electrónicos, como celulares, televisores y aires acondicionados, junto con la baja de impuestos internos, está generando una fuerte preocupación en Chile.
Esta medida, que busca acercar los precios locales a los valores internacionales y reducir la brecha con países vecinos, podría provocar una caída de precios en Argentina de hasta un 30%, lo que amenaza con disminuir el flujo de turistas argentinos que cruzan la cordillera para realizar compras en el país trasandino, especialmente en tecnología y electrodomésticos, sectores donde históricamente Chile ofrecía precios más competitivos.
Esta situación complica el turismo chileno porque los argentinos, principales compradores en zonas fronterizas, podrían preferir adquirir estos productos en su propio país debido a los menores costos y la eliminación de impuestos.
La “fiebre de compras” en Chile, que impulsaba el comercio y la actividad turística en regiones como la Patagonia, corre riesgo de frenarse, afectando directamente a comerciantes y servicios vinculados al turismo. La reducción arancelaria en Argentina representa un desafío para Chile, que deberá buscar nuevas estrategias para mantener su atractivo comercial y turístico frente a esta competencia creciente
LA PROPUESTA DE CHILE PARA ATRAER Y MANTENER A LOS TURISTAS ARGENTINOS
Según detalló Los Andes, Chile está analizando la restitución del IVA del 19% a turistas extranjeros no residentes, una medida que busca reactivar el turismo de compras y potenciar la competitividad del país frente a otros destinos regionales.
Esta iniciativa, presentada formalmente en mayo de 2024, tiene como objetivo principal incentivar la llegada de turistas, especialmente argentinos, que realizan compras en Chile y así dinamizar la economía del sector turístico y comercial, particularmente en zonas fronterizas.
El proyecto de ley que contempla la devolución del IVA fue aprobado en general por el Senado chileno en diciembre de 2023, pero desde entonces fue devuelto a comisión y permanece estancado, lo que genera incertidumbre entre comerciantes y actores del turismo. A pesar del apoyo de sectores empresariales y políticos, la falta de avance legislativo ha retrasado su implementación, lo que preocupa especialmente en regiones fronterizas donde el turismo argentino tiene un impacto económico directo.
CUÁL SERÍA EL TOPE MÁXIMO POR PERSONA
El plan establece que los turistas extranjeros podrán solicitar la devolución del IVA hasta dos veces al año, siempre que el monto de sus compras supere aproximadamente 21 dólares (0,5 unidades de fomento). El tope máximo a reintegrar por persona sería cercano a los 610 dólares, descontando los costos administrativos del trámite.
La devolución aplicaría exclusivamente a bienes físicos adquiridos para uso personal, excluyendo servicios y consumos cotidianos, lo que limita su alcance pero apunta con precisión al perfil de quienes cruzan la cordillera con fines de compra.
Para acceder al beneficio, los turistas deberán presentar la factura de compra y su pasaporte ante funcionarios de Aduanas al momento de salir del país, ya sea en aeropuertos o pasos fronterizos. Luego, tras la verificación, se les entregará un formulario sellado que habilita el reembolso del IVA.
IMPACTO ESPERADO Y BENEFICIARIOS PRINCIPALES
El consumidor argentino es el principal destinatario implícito de esta política, dado que las compras de tecnología, indumentaria, alimentos y productos de cuidado personal forman parte de una práctica sostenida potenciada por la diferencia cambiaria y las restricciones internas en Argentina. La devolución del IVA podría intensificar ese flujo, consolidando a Chile como un polo de atracción comercial y turístico para los argentinos.
Además, el Ejecutivo chileno sostiene que esta medida es parte de una estrategia más amplia para fortalecer el turismo no solo desde el ahorro, sino también desde la experiencia integral. Regiones como Osorno, Temuco o Puerto Montt, con infraestructura turística consolidada, podrían beneficiarse al articular la devolución del IVA con la promoción de servicios, gastronomía y paisajes, fomentando un turismo de valor agregado más allá del consumo puntual.
Expertos y representantes del sector señalan que el impacto fiscal de la devolución del IVA sería mínimo en comparación con los beneficios económicos que generaría. El aumento en las visitas, el consumo formalizado y la reducción de la evasión fiscal compensarían con creces cualquier pérdida en la recaudación. Además, esta política permitiría a Chile competir más eficientemente con otros destinos turísticos que ya ofrecen beneficios similares.
El turismo de compras ha sido un factor clave en el incremento del turismo hacia Chile, especialmente de visitantes argentinos. En los primeros nueve meses de 2024, casi 1.400.000 argentinos visitaron Chile, superando el total de todo 2023, lo que impulsó significativamente las ventas minoristas en la Región Metropolitana y en las zonas del sur como Osorno, Puerto Montt y Coyhaique.
UN OBSTÁCULO PARA TENER EN CUENTA
Aunque el proyecto fue incluido en un paquete de medidas con trámite rápido (“fast track”), su tratamiento en el Senado ha sido lento, con críticas por la demora en su avance. La devolución del IVA para turistas podría estar aprobada antes de fin de año si se agilizan los procesos legislativos, lo que representaría una oportunidad para recomponer el dinamismo del comercio bilateral y redefinir los flujos turísticos en las zonas de frontera.
En paralelo, el proyecto contempla también una tasa de turismo del 1,25% sobre el hospedaje para personas sin residencia en Chile, lo que genera un balance entre beneficios y costos para los visitantes
